En este pequeño espacio de 150 metros cuadrados, aunque con una altura considerable de 12 metros, vemos lo que queda de la “summa cavea” o filas superiores de las gradas del teatro donde se sentaba el público.
Como puede verse, los clásicos belenes napolitanos se exponían al estilo de los belenes originales del siglo XVIII.
El horno que ve se encuentra en funcionamiento y, en ocasiones, se realizan aquí eventos gastronómicos que se centran en la preparación de la pizza al estilo napolitano.